Las organizaciones vecinales,
ecologistas, sociales y personas a nivel individual que hemos decidido
constituir Asturies por un aire sano lo hacemos desde la preocupación por
los niveles de contaminación ambiental existentes en nuestra comunidad y su
repercusión sobre la salud de las personas. Es un hecho constatado para
nosotras que la mayor parte de la población de Asturies respira aire
contaminado por partículas en suspensión y otros contaminantes cancerígenos
como el benceno.
La Organización Mundial de la Salud
(OMS) considera que la contaminación con partículas conlleva efectos sanitarios incluso en
muy bajas concentraciones; de hecho, no se ha podido identificar ningún umbral
por debajo del cual no se hayan observado daños para la salud.
Por ello, nos unimos bajo una serie de
principios que sirven de base a nuestras reivindicaciones:
1. La salud no se
vende ni se delega, se defiende. La salud es el bien más preciado de las
personas y necesitamos de la implicación colectiva para lograr que se tomen
medidas efectivas que reduzcan de manera drástica los efectos negativos que la
contaminación está produciendo en la salud de las personas y del medio
ambiente.
2. El empleo
industrial no se defiende con instalaciones decadentes, con procesos
industriales obsoletos ni desde el más absoluto desprecio medioambiental. La
salud de los y las trabajadoras no se puede supeditar ni a la productividad ni
a los beneficios empresariales. Es una necesidad y tarea de todas, el tránsito
hacia un nuevo modelo productivo innovador y sostenible como garantía del
mantenimiento del carácter industrial de Asturies.
3. Las actuaciones
en materia de movilidad y gestión de tráficos deben ser coordinadas desde lo
local a lo regional. Se debe establecer la prioridad del uso de transporte
público, las actuaciones de mejora e impulso del ferrocarril, así como las
medidas que conlleven un progresivo abandono del actual modelo vinculado al
transporte por carretera de mercancías o al uso del coche particular en desplazamientos
cercanos en favor de alternativas como el uso de la bicicleta.
4. Apostamos por la
elaboración de un plan de residuos real y efectivo que favorezca el reciclaje y
descarte el modelo de incineración integral o en instalaciones industriales. Se
deben poner en marcha de igual modo planes de actuación para terminar con la
alta contaminación acústica de origen industrial, del tráfico o de zonas de
ocio que se sufren en algunos puntos de Asturies. Asimismo, denunciamos la
situación en la que se encuentra la calidad de las aguas y la nefasta política
de tratamiento de aguas residuales que sufren algunas zonas.
5. Exigimos
transparencia y claridad a las Administraciones, con protocolos sencillos y
efectivos dirigidos a la población a través de todos los medios al alcance
(incluyendo los medios de comunicación generalistas), cuando se produzcan
situaciones de mala calidad del aire, así como la puesta en marcha de
limitaciones reales a las actividades que generen contaminación en días de
altas concentraciones y su exigente seguimiento. Para ello, solicitamos una
información real de las instalaciones de medición y su correcta localización
bajo criterios de obtención precisa de datos.
Por
todo ello, el colectivo “Asturies por un Aire Sano” desarrollará campañas de
información y movilización social para exigir a las correspondientes
Administraciones Públicas el desarrollo de planes integrales y concretos para que la población de los municipios con problemas de contaminación pueda
disfrutar de su derecho a la salud y también continuará la lucha por la
aplicación efectiva de cuantas medidas sean necesarias para reducir la
contaminación.